martes, 5 de abril de 2016

Experimento descontrolado

Chávez pagó 7 millones de euros para «crear en España fuerzas políticas bolivarianas»
El «comandante» firmó la entrega de fondos a la fundación de Iglesias, Monedero y Errejón para
ABC.ES


Esto tenían que saberlo los servicios de Inteligencia del Estado y no se ha hecho nada por impedirlo, y si no lo sabían habría que destituir a sus responsables. En cualquier sitio este tipo de injerencia de un país extranjero en la política de otro, sería tomado como un acto de espionaje y agresión de dicho país, y quienes desde dentro se hubieran prestado a esa intervención serían reos de alta traición. Por lo que el hecho de que aquí no suceda logra reafirmarme en el convencimiento de que Podemos está protegido para poder usarlo con intenciones que beneficien a determinada opción al debilitar a su adversario.

Hablando claro, siempre dije que a Podemos lo inventó el PP para debilitar al PSOE pero la maniobra se les ha ido de las manos. Hasta hoy mismo la estrategia electoralista y propagandística del PP para no perder votantes, y para recuperar los perdidos, se basa fundamentalmente en el miedo a que Podemos llegue al poder. Usa a Podemos para ello. De no existir Podemos ¿qué argumentaría?

Fueron los medios de la derecha los que lanzaron al estrellato televisivo a Iglesias y a Tania, además de al líder actual del PSOE, Pedro Sánchez, pasando por el entonces también desconocido Garzón de IU. Todos ellos tertulianos asiduos de El Gato al Agua de IntereconomíaTV. También participaron en darle popularidad a Rivera. Pero la pésima y contrapoducente política de medios del PP tumbaron a aquellas televisiones y otras tomaron el relevo de convertir a esos divos en carnaza para aumentar audiencias.

Perdieron el control y las sucesivas supuestas campañas contra Podemos no hicieron más que aumentar su popularidad y resultados electorales. Pero como era a costa del PSOE los estrategas del partido insistieron en dicha campaña con la ayuda televisiva casi exclusiva de 13TV desde el programa dirigido por el mismo que dirigió en Intereconomía la tertulia que lanzó a los actuales líderes de "la nueva política". Luego ya fué Roures quien vio su potencial mediático y político y se encargó de acogerlos, patrocinarlos y darles altavoz en sus medios.

Pero a lo que iba, lo aireado ahora, de demostrarse, podría suponer la ilegalización de Podemos; pero aquí, en donde ni a los partidos filoetarras se ilegaliza y en donde los partidos tradicionales están bajo sospecha pasando por los juzgados por corrupción, dudo que esto tenga consecuencias. Así que solo se quedará en parte del plan de ir bajándoles los humos poco a poco destapando lo que les haga ir perdiendo apoyos a medida que interese.

En todo caso servirá para forzarles a pasar por determinado aro y a aceptar acuerdos bajo cuerda, valga la redundancia. Este es el país de las chapuzas y de las actuaciones antidemocráticas en nombre de la democracia, aunque esa democracia no es otra cosa que una partidocracia insufrible y carísima que no está dispuesta a soltar la teta de la que viven: nuestros bolsillos. Y además, diciendo que es por nuestro bien.

La previsible pataleta de Podemos negando que el partido se financiara así, pues entonces no existía, e invocando a una terrible confabulación contra ellos porque están tocando el poder con las puntas de los dedos, no será más que la confirmación de que, a pesar de todo lo que dijeron y prometieron -incluso a quienes les financiaron- ahora quieren ser tan partidocracia como la que antaño criticaban llamándola casta. Ellos ya lo son y, como tal, aceptarán el juego. El riesgo es que el experimento, tal que aquel de Frankestein, ha tomado vida propia; y esto no es una novela, aunque sí puede ser un drama.

Pero no hay que olvidar que aceptan el juego con la intención de romper el tablero, usando la subversión, agitación y propaganda para desestabilizar y tener más oportunidades de ganar y que, como leninistas que son, no olvidan que uno de los medios más potentes para ello es precisamente la autodeterminación, por lo que su acercamiento y colaboración con los secesionistas es algo seguro. El multimillonario troskista y secesionista Roures, no ha hecho el esfuerzo de lanzarlos al estrellato para no aprovechar en algún momento ese potencial.