Mostrando entradas con la etiqueta María San Gil. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta María San Gil. Mostrar todas las entradas

sábado, 21 de junio de 2008

Suena la orquesta en cubierta....

Los compromisarios aplauden a quienes hablan en un sentido y luego votan lo que va en sentido opuesto.


Para empezar, acabo de ver en la web del PP cómo se ha censurado el discurso de Acebes. Se ha eliminado de él toda alusión a María San Gil. En sugundo lugar, sólo algo más del 50% de los compromisarios vascos se ha abstenido -ni siquiera han votado en contra- en la votación que ha aprobado la ponencia política, limpia de las aportaciones de San Gil, y que hasta ahora se mantuvieron para poder alegar que la política vasca no tenía motivos para desconfiar o para sentirse traicionada. Lo del SMS de Soria, "María, he recibido tu ponencia. ¡Arriba España!" es miserable.

La guinda ha sido que Soria, al presentar la ponencia y expresar agradecimientos, ha omitido mencionar a María. Pero aún hay más, pues esos mismos compromisarios han aplaudido hasta el paroxismo el discurso de Aznar, claramente opuesto a la línea que está siguiendo la dirección. Y como colofón final, después del rapapolvo recibido por parte de Aznar -y evidentemente no entendido por los compromisarios allí presentes puesto que votan lo contrario- Rajoy se ha apresurado a ofrecer a Ana Botella formar parte de la ejecutiva.

Puede que por indicación del Faraón, que la ha tenido a su lado como coartada en su largo caminar hacia la creación de un partido a su medida y afín al zapaterismo prisaico. Lo dicho: suena la orquesta en el Titanic.

El iceberg San Gil.

Retirada de la ponencia política del PP la aportación de María San Gil crítica con el PNV.

Mucho hablar, mucho brindar, mucho aplaudir, mucho decir que el PP debe estar donde esté San Gil, pero al final, ésta tenía razón al no fiarse de la actual cúpula del partido. Todo el cuento chino que desplegaron para decir que la política vasca no tenía razones para dar portazo a la ponencia ha quedado desmontado. Los que dijeron que María se iba poco menos que por una paranoia, han quedado desenmascarados en su miseria. La inclusión de su aportación no fue más que una campaña orquestada para intentar desacreditarla de forma zafia, ruín y miserable.

María conoce muy bien al nacionalismo vasco y sus trampas. Sabe de su intención verdadera. Se tiene que ver con él la cara día a día. Por eso su aportación hacía una crítica al PNV. Ahora eso se elimina y se sustituye por algo que no es cierto. Se dice que se reconoce el compromiso de los militantes del PNV en la lucha contra el terrorismo de ETA. No es cierto, no hay tal. El PNV nunca ha sido claro contra ETA, y el PNV son sus militantes, ¿dónde está dicho compromiso?

Pero más allá de si es o no cierto, el asunto lo que desvela es la maniobra de deslealtad hacia quien se ha jugado la vida día día en el País Vasco. Desvela la catadura moral de quienes dicen estar con San Gil mientras se hacen los extrañados porque ella se sienta engañada. Y la de quien, después de que María San Gil hablara de la deslealtad de Rajoy, dejó caer que la deslealtad provenía de la política vasca. Esa misma persona es la que será Secretaria General del partido. Y los compromisarios que aprueben la ponencia, no podrán ya decir que están donde está María..

El PP es un gran transatlántico, sí. Y María San Gil el iceberg contra el que se empotra. Veremos si hay botes salvavidas para todos.

viernes, 20 de junio de 2008

El cónclave.

Rajoy vuelve a insistir en un PP de centro.

Confieso que el nombramiento de Cospedal me hizo albergar alguna esperanza de que el PP retomara la vía de los principios. A pesar de que su postura con respecto a María San Gil de la inminente Secretaria Generala -¿es así?- no me gustó nada y me hizo atisbar un deje de miseria moral en su intento de descalificación de la valiente y coherente política vasca, dicho nombramiento y la línea que representa, o al menos representaba, así como la inclusión de la enmienda de Vidal Quadras en la ponencia política del PP, me pareció que podría suponer una reafirmación del PP en sus principios. Cosa que en absoluto hubiera sido así de haberse incluído a otros, por ejemplo a Gallardón, en la cúpula dirigente.

A ello había ayudado el saber que Cospedal habría hablado largo y tendido esta mañana con María San Gil, por lo visto con la intención de que ésta recuperase la confianza en la dirección del partido. Pero tengo mis recelos. Primero porque puestos a elegir para la Secretaría General a alguien que ostenta una Secretaría Regional, hubiera sido mejor elegir a uno de los cuatro que han conseguido ganar en sus respectivas Comunidades, no a quien ha perdido. Y luego porque creo que después del Congreso esa ponencia puede llegar a tener el mismo valor que tuvo el Pacto Antiterrorista para Zapatero. Convertirse en papel mojado en aras a anteponer la estrategia a los principios. La no asistencia de María me hacía temer esa deriva.

Pero ahora ya se vuelve a convertir en certeza después de oír a Rajoy insistiendo en que el PP es un partido de centro. Y más al tener noticia de que a Zaplana ni siquiera se le ha invitado. Ello no es más que escenificar la ruptura con el pasado inmediato, con la línea a la que han votado 10 millones trescientos mil votantes. Además de las palabras de ayer del nuevo portavoz del partido menospreciando la labor del ex portavoz parlamentario.

Sigue el juego zapaterista de decir una cosa y la contraria para intentar contentar a todos. Ahora se sabe que rodrigo Rato acude por sorpresa al Congreso de Valencia. Veremos si escoge entre lo primero que apuntaba en un sentido y lo segundo que apunta en el sentido de lo dicho por el nuevo portavoz.

Este mismo portavoz utilizaba una metáfora para referirse al partido. Lo definía como un gran transatlántico. Esperemos no sea el Titanic.

miércoles, 21 de mayo de 2008

Día de acontecimientos.

De la detención de etarras a la mordaza a la democracia.

Detenciones sonadas de etarras en Francia. Estupenda noticia, pero ahora nos querrán vender que eso demuestra la debilidad de ETA, cuando la banda tiene perfectamente amortizados a quienes participan en negociaciones, además de que los detenidos son terroristas perfectamente controlados por las Fuerzas de seguridad, pues fueron quienes participaron en las negociaciones con el Gobierno.

Por contra, me temo que eso lo que significa es que la estructura de ETA ha cambiado tanto y está tan poco controlada, que se permiten el lujo de hacer el regalo mediático al Gobierno de estas detenciones, para que pueda presentar como un "éxito" la detención de quienes podía haber detenido ya hace mucho. Ojalá me equivoque.

Después de que Rajoy desvelara que gallardonizará al PP, Fraga vuelve a apoyar a Gallardón y dice que "volverá" a convertir al PP en un partido de centro reformista. No entiendo entonces el apoyo a Rajoy, que sería quien lo alejó de ese supuesto centro.

El segundo de Soraya, Alfonso Alonso, intentó ponerle una trampa a María San Gil en la reunión de la directiva del PP vasco y anularla como símbolo de la resistencia a que Rajoy cambie al PP desprendiéndolo de buena parte de los principios por los que ella siempre ha luchado. Intentó que se le proclamara ya como candidata a lehendakari, a lo que María se negó hasta no ver si recupera o no la confianza en la dirección del partido. El PP vasco se ha mostrado poco decidido a elegir entre Rajoy y María San Gil, aunque ha permitido que las tesis de ésta última se impusieran.

Y Soraya ha actuado en el Congreso para impedir que Rosa Díez tenga voz propia en el Parlamento. Alucinante, para algo que hace... Es inaudito que esta muñequita no haga nada contra el Gobierno y sí contra quien está bastante más decidida que ella a hacer oposición. Se ve que no quiere que le hagan sombra. Es absolutamente miserable y antidemocrático.

Quienes siguen viendo el mundo como derechas e izquierdas son los que nos están impidiendo reforzar la idea de unidad y solidaridad, además de fomentar los enfrentamientos personales. Rosa Díez, por encima de sus ideas políticas de izquierda, se considera española y opuesta a los nacionalismos, además de anteponer el sentido común a consideraciones partidistas. Considera que la igualdad no se consigue sin justicia y sin libertad, además de ser, hoy por hoy, la única voz que expone la verdad en el Congreso, al margen de divisiones partidistas interesadas.

martes, 13 de mayo de 2008

Un PP sin referentes

El PP presenta su ponencia política sin María San Gil, pero reponiendo lo que habían corregido e hizo que ésta la abandonara.

Es el rizar el rizo y el más absoluto de los patinazos. El PP ha tragado con todo lo que proponía María San Gil a la vista del revuelo producido por su abandono de la ponencia y decepción con Rajoy y con el partido. Los diez puntos que le habían corregido a la presidenta del PP vasco en su redacción inicial, ahora los han dejado como estaban. Pero ya es tarde. Y además el asunto se agrava aún más, pues ello es una clara evidencia de que no hay convicciones ni principios, pues si se consideraba que esos diez puntos tenían que ser retocados, ¿porqué no se ha mantenido dicha decisión?

María San Gil es un referente moral no sólo para el PP -bueno, para los votantes del PP-, sino también para mucha gente que no son votantes de dicho partido. Pasaba lo mismo con Rosa Díez en el PSOE, y aún ahora, pues sigue siendo un referente moral para gentes que no son votantes del PSOE ni tampoco de su nuevo partido. Pero el PP se ha confundido con respecto a sus votantes. Los votantes del PP tienen un alto sentido crítico y un nivel de formación y de información que no permite su manipulación al mismo nivel que los de otros partidos. Ni tampoco están dispuestos a desprenderse de principios y convicciones con el único propósito de ganar unas elecciones.

Rajoy se ha rodeado de quienes anteponen la estrategia a los principios y eso, si ya es una práctica deshonesta siempre, en el caso del PP es algo absolutamente contrario a la ética de la mayoría de sus votantes. El daño está hecho. con respecto a San Gil desde luego, pues ya no se volverá a fiar de Rajoy jamás, después de sentirse traicionada y maltratada. Rajoy no ha cogido el toro por los cuernos y delegó en segundón trepador para intentar arreglar el asunto con San Gil, y éste no sólo no tiene nivel para dicho recado, sino que además se ha cargado la bolsa de la compra.

Si Rajoy no tiene lo que hay que tener para solucionar siquiera los problemas internos del partido que lidera, ¿como va enfrentarse a problemas que nos incumban a todos? Su última reacción al decirles a los cargos del PP que no hablen sobre este asunto, no es precisamente un ejemplo de como enfrentar una crisis.

María San Gil no tiene más aspiración política que la de mantener firmemente la defensa de la España constitucional, no plegarse a las exigencias de los nacionalismos que no persiguen otra cosa que romperla, y exigir la derrota de ETA y el respeto a las víctimas. Su ponencia expresaba íntegramente lo que el PP decía justo antes de las elecciones. lLuego ha sido la nueva cúpula del partido la que ha querido cambiar eso, y además, sin ser respaldada por ningún principio ético, moral, o simplemente razonado en clave distinta a determinadas conveniencias coyunturales y tácticas, por lo que luego se ha visto, sino sólo y exclusivamente por dichos motivos electoralistas y de cara a trapisondas con los nacionalistas.

Ella sabe muy bien cómo se las gastan los nacionalistas y su insaciable sed. Sabe también que nunca pararán sin obtener su objetivo de independizarse. Y sus convencimientos los defiende con alto riesgo de su vida. Esta valiente mujer que ha sido testigo presencial del brutal y frío asesinato de quien era su compañero de partido y amigo mientras tomaba un café con él, esta mujer que le ha plantado cara al cáncer y ahí está con una sonrisa, no era alguien a quien podían torear enviándole a un subalterno, por bien que escriba.

Por mucho que Rajoy no quiera que se hable de eso, este asunto ha generado un terremoto en el PP. Los apoyos a San Gil no son otra cosa que veladas críticas a Rajoy, y no tan veladas. Su electorado está entre incrédulo e irritado, cuando no seriamente enfadado y percibiendo que se le ha traicionado. Las últimas declaraciones de algún nuevo "promocionable" no son más que un insulto, pues si fuera cierto lo que dicen ahora de que el PP es el que tiene que estar donde esté San Gil, ¿porqué ha sido precisamente desde el aparato del PP desde donde se ha intentado posicionar a éste claramente "frente" a San Gil y no "donde" San Gil?

El PP en su nueva ponencia se presenta en uno de sus puntos como partido de "centro", con lo que ya hace un desdén hacia su amplia base que se declara de derechas sin ningún complejo, y en otro punto -dos o tres más abajo- se declara liberal y heredero del espíritu de las Cortes de Cádiz. Ya no se sabe si es para contentar al mismo tiempo a los gallardonistas y a los "esperanzados", pero lo de "centro" suena hueco. Y a falso. Ya son demasiadas cosas las que están copiando del PSOE en estos dos últimos meses.

martes, 12 de febrero de 2008

La vergüenza del gallego.

Los animales extremistas gallegos atacan a María San Gil.

La presidenta del PP en el país Vasco, María San Gil, ha sido agredida en su visita a la Universidad gallega de Santiago de Compostela, al tienpo que le gritaban "española" como si ello fuese un insulto. Estos verdaderos descerebrados incluso le gritaron "¡ojalá te mate ETA!".

Estos mismos eran de los que jaleaban lo de Nunca mais ante el chapapapote del Prestige en una campaña anti PP que fracasó tanto como que en los pueblos más afectados por el vertido del Prestige ganó el PP. Tampoco están protestando por el vertido en Algeciras, no; allí se ve que no hay chapapote.

El chapapote solo existe cuando suceden estas cosas gobernando el PP. Pero lo que sí existe gobernando el PSOE es el ataque, el enfrentamiento, la agresión física y el deseo de muerte hacia quien no piensa como estos, que no es que piensen, pero que ahí están como socios de estos cuentistas que nos gobiernan.

Lo de hoy es una vergüenza para cualquier persona, y aún más para los gallegos.

domingo, 22 de abril de 2007

Carta de una mujer a otra

QUERIDA MARÍA:


No sé cómo empezar a escribirte esta carta. Pero voy a hacerlo como me salga, porque quiero decirte en público las cosas que pienso de tí, lo que he sentido cuando he sabido de tu enfermedad, del nuevo golpe que la vida te ha dado. Esta no pretende ser una carta política, aunque tú y yo lo seamos. O, pensándolo bien, quizá sí es una carta política, porque la política no tiene por qué estar reñida con los sentimientos. Al fin y al cabo ambas nos hemos encontrado en la vida gracias a nuestro compromiso político, a nuestra dedicación vital. Y ambas estamos en esto --desde historias y trayectorias completamente diferentes--, con la intención de ser útiles a los demás, con el deseo de que nuestro trabajo sirva para que la gente sea, a la postre, algo más feliz. Así que, definitivamente y desde esa perspectiva pues sí que va a ser esta una carta política de mujer a mujer, de compañera a compañera.

María, la vida es verdaderamente injusta. Seguro que tú llevas esto de la injusticia mejor que yo; es la ventaja que teneis los creyentes. Yo no puedo esperar a que en la otra vida te compensen por lo que estás sufriendo en esta y por eso me parece que es complétamente injusto que tu Dios te mande una nueva prueba. Yo creo que ya has sufrido bastante, que ya has demostrado suficiente valor, que ya has pasado lo tuyo, que te graduaste en dolor y horror el día que viste como asesinaban a tu amigo y compañero Gregorio Ordoñez . Y que desde entonces no has hecho sino ir sumando sacrificios, disgustos, temores, penas, desesperanzas…

Pero en fin, no vamos a hablar de esas cosas. Quedamos en que creo que es una injusticia lo que te está pasando; y quedamos en que si tú estás en lo cierto, tu Dios te lo compensará, dentro de muchísimos años, en la otra vida. Yo quería hablarte en esta carta de ahora, de lo humano, de lo que más o menos está bajo nuestro control. Sabes María que te tengo un enorme cariño. Que admiro tu entereza, tu sencillez, tu falta de doblez, tu cercanía, tu generosidad. Y sé que este es un sentimiento compartido por muchísima gente, por miles y miles de españoles de todos los colores políticos que te admiran y te quieren. Tu proyeccción humana es con mucho superior a tu impacto político; la gente quiere a María, a esa mujer de rostro sereno que les habla desde el País Vasco, a la que escuchan como si fuera de la familia, que les dice de forma sencilla verdades como puños. La gente aprecia que nunca subas el tono de voz, que siempre des la cara, que mantengas la mirada serena incluso ante el asesino, que no bajes los ojos, que no te ocultes tras las palabras.

Los ciudadanos españoles quieren a María, a la mujer, al ser humano completo que tú eres; pero no creo que sepan valorar cuanto vales. Porque con esa forma de ser que tú tienes, haces que los retos más complicados parezcan cosas sencillas de abordar. Por ejemplo: a todo el mundo le pareció natural que ocupases el puesto de Gregorio Ordóñez después de que ETA lo asesinara en tu presencia. Pero no era algo tan natural; la decisión que tomaste no fue fácil porque esa decisión te cambió la vida. A partir de ese momento aprendiste a vivir sin privacidad, con escoltas. Aprendiste a renunciar a esas cosas sencillas que a veces no valoramos suficientemente: pasear con los niños por el parque, empujar el columpio, darles la merienda en un banco, salir a tomar el sol, un café en la esquina, con amigos… Todo eso se acabó para tí, una joven mujer, llena de vida y de proyectos personales. A partir de ese momento empezaste a pensar y a trabajar por los proyectos de los demás; conviene que la gente reflexiones sobre eso. Renunciaste a tu vida privada para trabajar por la vida de otros. Por su vida y por su libertad. Lo que hiciste fue un acto heróico, un acto de un valor extraordinario.

Tampoco fue un regalo sustituir a Jaime Mayor Oreja en la Presidencia del PP en el País Vasco y en la candidatura a Lehendakari. Fue un gran reto que tú supiste asumir con determinación y espíritu positivo. Ahí volviste a demostrar cuanto vales, la buena madera de la que estás hecha, María.

Yo sé lo mal que lo has pasado estos dos últimos años en el Parlamento Vasco. Y no es porque me hayas hecho muchas confidencias; ambas somos en eso bastante pudorosas. No nos solemos permitir el “lujo” de contarnos nuestros pesares; es como si con una especie de códico secreto supiéramos que tenemos la obligación de trasnmitirnos optimismo. Pero sé cuanto te dolió que cuando el Lehendakari te dijo “vosotros representais lo peor de este Pais...”, no hubiera nadie de los bancos socialistas que se levantara y te diera un abrazo para que quedara patente que más allá de nuestras disputas, los demócratas sabemos que lo peor de nuestro pais es ETA el partido que se beneficia electoralmente de sus crímenes. Pero nadie se movió. No lo sé, nunca me lo has dicho; pero yo en tu lugar hubiera sentido más esa soledad que las palabras del lehendakari; porque de Ibarretxe, del PNV, ya no creo que esperes nada. De los que son --o fueron-- compañeros constitucionalistas, seguro que sí.

No sé si lo que voy a decir es una bobada; pero he decidio escribir según me fueran saliendo las palabras. Así que te digo que he pensado que esto de tu cáncer seguro que se debe a que has somatizado el sufrimiento. Yo creo que el cuerpo se resiente por la parte más débil; y tú debes tener un gen propenso a mutar en células cancerígenas… Seguro que habrá quien me explique que esto que estoy escribiendo no tiene ninguna base ciéntífica; y seguro que es así. Pero a mí nadie me quita de la cabeza que lo que se sufre termina saliendo por algún sitio. Así lo veo; y así de doblemente injusto me parece.

María, ahora se trata de torear este nuevo morlanco. Te he oido contarlo en la rueda de prensa; y parecías tan serena, tan confiada, tan tranquila… Parecía que nos querías consolar a nosotros, a los que te estábamos escuchando, a los que estábamos sobresaltándonos por tí. Sé que te vas a enfrentar a este reto como a todos los anteriores; y que ahora también vas a superar la prueba. Pero déjame pedirte un favor: déja que los que te queremos te ayudemos a dar la batalla. Deja que te queramos, que te hagamos mimos; déjanos ciudar de tí. Sabes, le oí decir una vez a la poetisa cubana Dulce María Loinaz que se puede llorar en soledad, ,pero que para reir se necesita compañía. Venga, María: si tu nos dejas, haremos guardia para reir contigo.

Un beso muy fuerte, preciosa.

Rosa Díez (a María San Gil)