Continua e intolerable falta de sensibilidad y de respeto a las familias de las víctimas de la tragedia de Barajas.
El último vídeo filtrado para que El País lo colgara en su página de internet -y de paso lo emitiesen todas las cadenas de televisión- ya es demasiado. Además de que está cortado y no se aprecia desde qué altura cae el avión y con ello las familias vuelven a elocubrar sobre si el fallecimiento de sus allegados fue inmediato o por el contrario fueron conscientes del terrible fin que se les venía encima, además de ello digo, les hace revivir e imaginar el infierno que pasaron sus familiares.
El que dicho vídeo se haya filtrado además del supuesto informe preliminar, que luego no ha sido tal, y la filtración provenga desde el Ministerio responsable de la seguridad aérea y que ni siquiera tendría que tener dicho informe, y mucho menos antes que el juez, exige una inmediata explicación y una profunda investigación.
¿Cual es el objetivo de tantas filtraciones que dan pie a teorías infundadas y propagadas por los altavoces mediáticos? ¿Acaso eso ayudará a averiguar lo que pasó? ¿Ayuda a la tranquilidad de las familias el ver como su dolor es objeto de tráfico interesado?
El efecto de las informaciones sobre el asunto es notorio en la opinión pública y hace palidecer otras informaciones. ¿A quienes beneficia el que las otras informaciones pierdan interés y no sean objeto de atención por la opinión pública? ¿Es casualidad que se produzcan cuando cada vez parece evidenciarse que la gestión inmediata de la tragedia -así como la propia gestión del aeropuerto- ha sido llevada a cabo por incompetentes?
La Vicepresidenta De la Vega ha puesto cara de enfado y ha dicho que las filtraciones no son cosa del gobierno. Así, porque lo dice ella. Claro que si nos guiamos por lo que ha dicho en estos últimos años, cabe empezar a dudar, ¿pero qué digo?: cabe casi tener la seguridad de que es desde allí desde donde se han producido. Los antecedentes de esta señora cuando se pone a sentar cátedra, así lo augura.
En cualquier caso, no parece ética ni moralmente aceptable el que las familias estén constantemente expuestas a toda clase de rumores y especulaciones que no hacen más que remover su dolor y crearles desconcierto. Y mucho menos que sea desde el gobierno desde donde se provocan.
He visto el vídeo una vez y he tenido suficiente: No se ve nada.
ResponderEliminarDicen, explican... explican lo que quieren...
Que si la grabación se puede congelar y ver detalles, que sí...
Eso sí, admiten que es de muy mala calidad, desde lejos, muy lejos.
Pero aquí tenemos el asunto: ¿por qué emitir una vez y otra algo que sólo sirve para hacer sufrir a las familias?
Si no hay nada claro aún, si no se sabe nada, ¿por qué causar este dolor innecesario?
Obviamente, por lo de siempre, esparcir cortinas de humo.
Es significativa la dimisión del piloto vocal en la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil Valentín Villarroel, habiendo alegado la constante vulneración de los procedimientos legales para realizar la investigación.
Como no cabía esperar otra cosa, la ministra inútil donde las haya, Magdalena Álvarez, le ha negado su derecho a no ser cómplice de las calaveradas del Gobierno.