PSOE y PP han cerrado el acuerdo para renovar cuatro miembros del Tribunal Constitucional; el Defensor del Pueblo y su adjunto; los doce consejeros del Tribunal de Cuentas; y la directora y la adjunta de la Agencia de Protección de Datos.
De todo estos acuerdos me sorprende sobre todo el "regalo" que hace el PP del Tribunal de Cuentas que seguro paralizará asuntos que ya tenían acorralados a los socios golpistas de Sánchez.
Esto ha sido un cambalache con toda seguridad. No sé a cambio de qué entregan el control de dicho Tribunal pero puedo sospechar que a cambio de algo que Casado y Teodoro crean una amenaza para sus fines de pactar con Sánchez. ¿Quizás Ayuso? ¿Van a unir fuerzas para tumbarla y eliminar así un impedimento para cocinar asuntos conjuntamente mientras simulan enfrentamientos?
Mucho me temo que nada limpio preparan, dado la rapidez y secretismo con los que se ha desarrollado el asunto. Y, sobre todo, por lo que considero un regalo innecesario del control de dicho Tribunal. No puede haber sido gratis y dado los personajes que han fraguado el acuerdo me espero cualquier dislate.
Del PSOE, cualquier cosa, pero de estos que dirigen al PP, también. Van a lograr que la esperanza despertada por Ayuso se convierta en una ilusión frustrada y que el PP se quede en nada sin que nadie en el partido abra la boca hasta que sea irremediable. Al tiempo.