lunes, 2 de octubre de 2017

Los responsables no llevaban porras.


El silencio de la UE de hoy, cuando antes apoyaba al Gobierno, augura un posicionamiento distinto. Ya veremos lo que dicen a las 12 de la mañana. La impresión es que se sienten engañados por Rajoy.

Las imágenes de ayer han magnificado exageradamente el enfrentamiento en la calle, minimizando la sedición y el golpe de Estado que Rajoy sigue intentando hacer como si no existiera. Ese "no ha habido referéndum" suena a ceguera ante las imágenes que dan la vuelta al mundo. Se ha usado a las FFSS como cortina de humo del fracaso de los políticos permitiendo la traición de los Mossos que ha propiciado las encerronas de las que han tenido que zafarse.

Los independentistas y sus activistas han provocado esto y han tenido éxito al conseguir esas imágenes que usan muy eficazmente en su propaganda. El mundo de hoy se mueve por imágenes y ya tienen las que querían y necesitaban. Sus propagandistas son muchísimo más eficaces que los del Gobierno, suponiendo los tenga.

Rajoy no puede callarse mientras se culpa a quienes obedecían sus órdenes, traicionados por quienes obedecían las de aquellos que el Gobierno tendría que haber cesado para que no pudieran darlas. Y enfrentados con la gente que otros, que también tendrían que haber sido despojados de autoridad, usaban como escudos para lograr su objetivo, que no es otro que la declaración de independencia y romper España.

Las FFSS no pueden ser culpadas de los errores de quienes las mandan al matadero sabiendo que van a una misión imposible. Si lo que se pretendía era enviar fuerzas de intermediación que hubieran mandado a mediadores, con Rajoy al frente, no a las fuerzas cuya misión es precisamente usar la fuerza como último recurso.

El Gobierno, Rajoy, les ha hecho una encerrona para desviar la responsabilidad de su persona. Cobardía, imprevisión y traición imperdonables. Él ya no puede ser parte de la solución y si el PP no lo ve, también se quedará fuera de la misma. Y los responsables de los partidos que han impedido la necesaria unión para enfrentar el ya largo desafío independentista, tampoco.

Esta crisis catalana, que Rajoy ha intentado minimizar a nuestros socios diciendo que la tenía controlada, hoy está afectando al euro, que baja, por lo que ya es una crisis europea y eso no se lo van a perdonar. Ni a Rajoy ni a los independentistas.  Aquí ya afecta a la bolsa y fundamentalmente a la Banca catalana, CaixaBank y Sabadell bajan espectacularmente -se dice que están pidiendo facilidades al Gobierno para cambiar sus sedes sociales e irse de Cataluña-, y a la prima de riesgo. Ya nos está costando dinero a todos, y lo que costará con lo que viene. Ya veremos, si se produce lo inevitable, qué pasa con las pensiones, subsidios y hasta sueldos de funcionarios, que aunque debieran afectar primero a quienes se han creído los cantos de sirena y que el problema era votar, puede que nos afecte antes a los demás habida cuenta de la inyección de millones que el Gobierno dio a Cataluña justo antes del fin de semana del circo.