viernes, 25 de mayo de 2018

Juegos electorales.


El PSOE presentará la moción de censura -o a lo mejor lo que hace es anunciar que la va a presentar, no que la presenta ya-, por un cálculo electoral. Creen que aunque no salga adelante ganarían más votos (o perderían menos) que si no la presentan y, además, obligarán a Rivera a retratarse. Piensan que eso puede perjudicarle, y ya se sabe que ese es el objetivo fundamental de la partitocracia, y por tanto pueden frenar la subida de Cs y la fuga de votos a esa formación.

Por ello, apostaría a que la moción de censura se presentará sí o sí, y se convertirá en el monotema de los próximos meses. En el PP están haciendo también sus cálculos, así que El criterio también será electoral. El cambio de candidato y la convocatoria de elecciones dependerá de lo que entiendan que menos votos les cuesten.

Ciudadanos se ha curado en salud marcando un antes y un después ante la sentencia, aunque creen que sería un mal momento por lo de la crisis catalana. Pero también contemplan la pésima imagen internacional de un gobierno de un partido condenado, aunque no sea una condena por lo Penal sino por lo Civil.

Por lo tanto, este intento del PSOE de recuperar la iniciativa y de centrar el foco informativo, al final lo centrará Rivera, que ante esta panda de políticos que padecemos parece ya un gigante político. Y la verdad es que está demostrando ser el más listo. Pero me temo que aquí mandan los tramposos, así que ya veremos si no es esa moción la que, de una forma u otra, se carga a Rajoy dejando a Cs descolocado. Sánchez es muy capaz de dejar en manos nacionalistas el futuro si ese futuro incluye su estancia en la Moncloa, anque sea de un minuto.