La dictadura del narco.

Monumental fraude de la dictadura chavista. Se frena el recuento cuando se lleva escrutado entre el 40% y el 80%, que ofrecía el resultado de un 70% de votos para el candidato de la oposición. Y ya frenado el recuento y sin supervisión de nadie más que de los esbirros chavistas, el ente electoral chavista proclama la victoria de Maduro. España debiera de estar entre los países que no reconozcan esos resultados, a todas luces fraudulentos, para que la dictadura de Maduro se perpetúe, pero no lo hará porque está hasta las cejas de la corrupción que parte de Venezuela y que aquí representan Garzón, Zapatero y la Fiscalía al servicio del sanchismo, también cliente del chavismo.Así que tratarán de tapar el fraude y apoyar las amenazas de Maduro que van en camino de acabar en un río de sangre.
La cúpula del ejército está con Maduro porque éste puso en sus manos el control del narco. Pero no para acabar con ello sino para vivir de ello.
Sinvergüenzas, corruptos y delincuentes de largo recorrido temen que el poder cambie de manos y salgan a la luz todas sus corruptelas, desde las fragatas de Bono a las maletas de Delcy, Ábalos por medio. Y por supuesto, Zapatero y Monedero de "observadores", que "garantizan" la limpieza de las elecciones.
El PSOE, el Gobierno y todos sus medios afines prefieren y apoyan una dictadura, si es de izquierdas, a una democracia en donde no gobiernen los suyos. No hay más que ver al Ministro de Asuntos Exteriores, Alvares, apoyando la postura de Maduro contra unos representantes del pueblo español y a todos los medios del pesebre aplaudiendo al dictador.
¿Y ahora qué? Pues ya lo estamos viendo, todos rendidos al imperio del narco, que paga muy bien a los amigos.