El problema real, y muy grave para el PP, es la falta de criterio común y de cohesión interna que se ha evidenciado con la negativa de Ayuso a acudir al silbido de Sánchez.
Y para colmo sale el portavoz del partido y no apoya a una Presidenta de una Comunidad Autónom, precisamente la más potente y en donde se ha logrado una mayoría absoluta que supera el total de votos de la izquierda sanchista. Esa estupidez de Sémper con su "yo iría" no se entiende en quien cobra para defender a su partido, se supone, y no para traslucir falta de unidad.
Mucho más dicho por quien jamás tendría la oportunidad de decidir si iría o no, pues jamás será Presidente de una Comunidad Autónoma, y además agravada por catalogar el asunto como una cuestión de enfrentamiento personal. No hay más que ver la dimensión política del asunto y la preparación concienzuda por parte de Sánchez y sus estrategas para producir división en el PP, cosa que evidentemente han conseguido dejando a los votantes de dicho partido desconcertados sin saber si escoger entre papá y mamá o quedarse al margen en el sofá. Si la orden de Feijóo ha sido la de cerrar filas con Ayuso, esos "peros" del portavoz sobran.
Para remate, este martes van a acudir al silbido de Sánchez dos Presidentas de CCAA del PP, la de Baleares y la de Extremadura, lo que desconcertará más a los propios.
Lo lógico para salir de este enredo y aclarar las dudas de los electores, sería negarse a acudir. No se va a tratar nada de importancia habida cuenta de que Sánchez no quiere hablar de financiación, así que nada pasaría si se aplazara el asunto a la Conferencia de Presidentes. Pero no creo que el afán de protagonismo de esas presidentas les haga renunciar a su foto de portada. Lo que con toda seguridad deará la oportunidad a Sánchez para otra jugada de tahúr. No tiene más que dar algo a esas Comunidades (total, no lo paga él) para luego decir que Ayuso no ha querido esos beneficios para sus ciudadanos.
Repito: si queda algo de cordura en el PP debieran de suspender esas reuniones y aplazarlas para la Conferencia de Presidentes. La piña con Ayuso hay que escenificarla para hacer olvidar el "yo iría, pero". Sus votantes lo agradecerían y a lo mejor no decidirían irse al sofá y pasar absolutamente.
Lo que tengo bastante claro es que los votantes madrileños apoyan el plante de Ayuso ante Sánchez.
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