Ni cuestiones humanitarias, ni médicas ni cuentos chinos; era simplemente parte del pago de un chantaje.
Así queda confirmado cuando el Ministro de Justicia ha dicho en la pro gubernamental cadena SER que "las circunstancias han cambiado" ahora que la ETA ha roto la tregua. Lo sangrante de este asunto es que no se hubiera considerado así tras el asesinato de los dos inmigrantes, señores Palate y Estacio, en el atentado de la T4 de Barajas. Es sencillamente insultante para su memoria. Y es una constatación de que el gobierno tenía decidido mandarlo a su casa como desde aquí denuncié.
El que De Juana volviera a la cárcel es sencillamente algo de sentido común, y que el gobierno estuviera dispuesto a dejarle ir a su casa, una evidencia de que tenía tratos con los terroristas que ahora se dan por rotos. Lo sangrante es que es ETA quien manda en este asunto. Es ETA quien decide cuando se rompe o no la negociación independientemente de que haya habido asesinatos o no. Lo l´gicop hubiese sido que fuera el Gobierno el que hubiera roto definitivamente cualquier negociación en el mismo momento del atentado en diciembre.
Estamos en manos de chanchulleros tramposos dispuestos a a cambiar las reglas del Estado de Derecho a conveniencia de una banda de hijos de puta asesinos. La presión social sobre el Gobierno ha sido la que ha logrado que dejen de jugar con el Estado de Derecho para conseguir lo que es evidente que buscaban: utilizar la política antiterrorista en beneficio partidista. Intentaron llegar a un acuerdo con ETA para poder vender que ellos habían conseguido la paz. cuando no es la paz lo que negociaban pues no es el final de ETA lo que buscaban, sino su apaciguamiento a cambio de prebendas imposibles.
Lo que ahora exige Rubalcaba al PP suena a otro ejercicio de cinismo. Les pide a los populares que actúen como lo hizo el PSOE cuando la ruptura de la anterior tregua, en un intento más de igualar las dos situaciones. No sólo la situación no es la misma, sino que no creo que el PP esté dispuesto a decir que apoya al gobierno y por detrás sentarse a negociar con los asesinos. Eso y no otra cosa es lo que hizo entonces el PSOE.
A la cárcel
Por supuesto que el exquisito trato con De Juana era parte del pago de un chantaje, no hay más que ver cómo se han apresurado a subirse los pantalones cuándo han visto que estaban mostrando el trasero.
ResponderEliminarIgual con Otegi, el hombre de pazzzzzzzzz... Le dejaron quedarse en casita aquel día que nevaba tanto, pero nada más subirse la bragueta se han dado cuenta de que ¡ya es primavera!...
Capullos.