martes, 10 de junio de 2008

Regular el derecho de huelga

Ahora que perjudica a Zapatero, a lo mejor se lo piensan.

Cuando en otras ocasiones he denunciado -durante otras huelgas en las que los piquetes han actuado ocasionando perjuicios a los que somos ajenos a su conflicto- que los piquetes informativos no informan más de que te partirán la cabeza si no haces lo que ellos digan y si se te ocurre acudir al trabajo en una huelga, se me ha tachado de fascista y de ir contra el derecho de huelga. Ahora parece que esos mismos hacen lo mismo y les parece bien.

El derecho de huelga es un derecho de inferior categoría a otro sin el cual no podría existir: el derecho al trabajo. Por lo tanto, nunca puede estar por encima de éste. En nombre del derecho de huelga no se puede privar a quienes quieren trabajar, y no secundar una determinada huelga, de su derecho a trabajar. Nunca. Estos que ahora parecen descubrir lo que apunto, antes no hablaban de la libertad de huelga sino de "huelga obligatoria".

Pero eso ha sido una práctica totalmente aceptada por la izquierda y practicada con asiduidad por los sindicatos de partido en España. Incluso en huelgas que nada tenían que ver con la defensa de los derechos de los trabajadores, sino con los intereses políticos de los partidos a los que sirven. El derecho de huelga tampoco puede conculcar derechos de otros ciudadanos ajenos al supuesto conflicto laboral que pueda motivar una determinada huelga.

Pero el problema de ahora no es ése. El problema es que esta huelga del transporte está fuera del control de los sindicatos de partido. Y además, es contra el Gobierno al que apoyan dichos sindicatos. Por tanto hay que criminalizarla. Y en ello están.

Las situaciones de coacción de los piquetes que he denunciado en otras huelgas, las sigo denunciando ahora. Pero los que aplauden a dichos piquetes cuando están organizados por los sindicatos políticos UGT o CCOO, ahora se rasgan las vestiduras. Pues no. Tan mal están esas actuaciones ahora como entonces. Pero hay más.

Ahora se alzan voces acusando de que la huelga estrangula la economía del país, y son las de los mismos que aplaudían las huelgas que, en otros momentos y bajo otros gobiernos, han dañado seriamente nuestra economía y nuestro bienestar. Son los que han aplaudido que nos cubra la basura en el metro, o que en vacaciones se paralicen los aeropuertos, o que no se pueda pernoctar, o que fallen los transportes justo en fechas señaladas de alta afluencia turística. Los mismos que si se ha tenido que emplear a la fuerza pública para controlar a los piquetes violentos, por ello han llamado fascistas a los gobernantes. Ahora aplauden dichas actuaciones y las piden a gritos.

Los que ahora incluso piensan en la organización de convoyes de abastecimiento controlados por las FFAA, habrían acusado de golpista a quien se le hubiera ocurrido siquiera pensar en algo similar bajo otro gobierno. Y es que se mueven por consignas y no por convicciones. Y si hoy algo está bien según una determinada consigna, pasa a ser condenable tan sólo por el cambio de dicha consigna; no por el hecho en sí mismo, ni por los perjuicios que ocasione.

Urge una regulación del derecho de huelga que equilibre los derechos de unos y de otros, y que proteja el derecho de huelga sí, pero protegiendo el derecho al trabajo y al bienestar de los ajenos al conflicto. Y mientras, el Gobierno ausente.

P.D. Ya hay un muerto a causa de esta huelga. Un miembro de un piquete ha muerto atropellado por una furgoneta cuyo conductor se negaba a secundar la huelga y pretendía seguir trabajando. El atropello se registró sobre las 17.30 horas y al lugar del suceso, en la carretera de Córdoba, en el término municipal de Atarfe (Granada).

2 comentarios:

  1. Cada día que pasa resulta más espeluznante la actuación de este Gobierno.
    Efectivamente, como izquierda, la huelga ha sido siempre impuesta con piquetes. La izquierda la ha considerado algo sagrado y la ha hecho cumplir por la fuerza, con violencia.

    ¿Y ahora?... Ahora ya no les hace gracia. Ahora les toca las narices a ellos, a los que están instalados en sus poltronas.
    Ahora los huelguistas son energúmenos a perseguir y neutralizar. ¡Maravillas del poder y la `pela´!

    Y lo más sangrante es que si se ha llegado a esta situación es ni más ni menos por obra y gracia de los de las poltronas.
    Cada vez que leo opiniones de bobos solemnes diciendo que "Sí, la economía va muy mal, pero no es culpa del Gobierno. Pasa lo mismo en toda Europa...", me dan ganas de vomitar. Si son mayores, les diría que lleven a sus nietos al parque, y si son jóvenes, que mejor se dediquen a la Play, porque...

    Claro que pasa en toda Europa, ¡y en todo el mundo! Pero los demás países no tienen los problemas que tenemos nosotros. Los países gobernados por políticos que trabajan y no se limitan a hacer el payaso como los nuestros, tienen opciones, se han preocupado de preveer, capean el temporal como pueden, ¡pero lo hacen!

    Estos sacos de mentiras nuestros, ni siquiera son capaces de llamar pan al pan y vino al vino. Pierden miserablemente el tiempo en buscar otra manera de llamar a las cosas. En escribir cuentos, en montarse unas fantásias vomitivas. En engañar a los medianeurona que se lo creen todo y aplauden como focas de circo.

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  2. En realidad no quería escirbirte aquí, he visto tu blog en LD y tras leerlo veo qeu a tí tb te han censurado en el país... pues yo soy otra de las censuradas... de momento han empezado porque mi blog no aparece en los anuncios de la comunidad, ni ls comentarios... por supuesto les he escirto... pero silencio absoluto... cómo me gusta la libertad de expresión prisaica!!!
    Menos mal que aquí no nos censura nadie!!

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