Los Reyes Magos de Barcelona rindieron pleitesía a Colau y a su política. En Madrid, los Reyes Magos -o payasos galácticos, que ya no sé como calificarlos- rindieron homenaje a Carmena y a su "política ecuménica". En Alicante, se ha rizado el rizo y los Reyes Magos fueron a mostrar su agradecimiento, al día siguiente de la cabalgata, a la ex alcaldesa dimitida Sonia Castedo y a su dedo "elector".*
Digo yo que para cuándo se volverá a la tradición que se celebra, que no es otra que rememorar un supuesto hecho histórico de, le pese a quien le pese, marcado carácter religioso. Los Magos de Oriente hicieron una visita de cortesía a Herodes, pero a quien rindieron homenaje fue al recién nacido en Belén. Aquí es a Herodes, al poder político, a quien homenajean.
En Alcoy no generan ninguna discusión política en la mejor y más antigua cabalgata. No rinden más homenaje que a los niños y a ese Portal de Belén viviente de la Plaza de España. Aunque a muchos ya sólo el nombre de la plaza y el del portal les haga brotar urticaria.
La política ya nos ha amargado bastante la vida como para que también amargue la ilusión de los niños y trastoque tradiciones. Y la estupidez también ha colaborado. Así que estúpidos y políticos mejor alejados de las celebraciones; a ver si así tenemos la fiesta en paz.
*La ex alcaldesa de Alicante se cuidó muy bien, antes de dimitir, de dejar elegidos a tres de sus amigos para que representaran a los Reyes. Como estaba indispuesta no pudo acudir a la cabalgata, así que esos agradecidos magos le hicieron una visita a domicilio.