viernes, 1 de mayo de 2020

Un día más de bochorno.


Produce bochorno oír a Simón sacando conclusiones, y haciendo comparaciones con otros países, basándose en unos datos que sabe irreales. Lo de mencionar a países donde la epidemia avanza no tiene otro sentido que el intentar jugar al "mal de muchos" para rebajar el absoluto fracaso de nuestro país.

No se hacen test suficientes y el número de los que se hacen está muy alejado de los que países de nuestro entorno realizan. Como infectados sólo se contabilizan los que han dado positivo en test PCR, y es sabido que hay infinidad de contagiados recluidos en sus casas a los que no se les realiza test alguno. Sobre como se computan los muertos por el virus sólo evidencia que el objetivo es tapar muchos.

La OMS sigue insistiendo en la importancia de hacer test mientras que aquí se dice que no son importantes. En base a esto, todo lo que propone el Gobierno es como jugar al Bingo. Y luego, si hay muchos "premiados" con el contagio, se les dirá que han jugado mal y con cartones falsos.

Lo que sí que es difícil es encontrar a alguien que hable tanto para no decir nada, a alguien que use de tantas citas técnicas para concluir que técnicamente no hay conclusión alguna.

Está claro que lo de la desescalada es tan falso como la propia palabra, que es inexistente. Se trata de una orden de Sánchez, sin más. Tan sólo se confía en que sea el propio virus el que frene su agresividad pero careciendo de plan alguno para impedir que vuelva a atacar sin medida.

Tan solo quiero recordar que lo que ahora se presenta como "bonanza" que permite acabar con el confinamiento, no difiere en nada de la "gravedad" que hizo necesario el confinamiento. Con lo que dudo de que haya sido necesario llevarlo hasta el punto que hemos tenido que padecer; porque o entonces no era imprescindible o bien ahora estamos suicidándonos al salir del encierro.