lunes, 21 de abril de 2008

Todos los medios de la "cuerda" progre defienden a Rajoy y atacan a Aguirre.

Todos los medios que han estado durante estos cuatro años atacando al PP, hoy defienden a Rajoy.

Ya sólo ese hecho es más que significativo. Quieren una derecha domesticada y que no pueda siquiera reprocharle su tremendo partidismo. Es evidente que la ven en Raojoy. Los medios que se propusieron promover una derecha a su medida y que apoyan a Gallardón como líder "prisaico" de la misma, hoy atacan a Aguirre -que ni siquiera se ha presentado como altermativa- y defienden a Rajoy. Desde El País hasta TVE, pasando por la SER, El Periódico de Cataluña, La Cuatro, etc...

Los barones del PP, todos los que viven del puesto, apoyan a Rajoy; no se atreven a otra cosa. Pero no es lo que en privado dicen. Claro que con esa presión del aparato a ver qué compromisario se atreve a votar por otra alternativa, o siquiera si alguien se atreve a presentar dicha alternativa. Nula democracia interna se llama a eso.

Rajoy se ha creído que ha aportado algún éxito al PP. Que yo sepa, de momento ha perdio dos veces ante Zapatero, además de haber perdido -según la opinión pública- todos los debates que ha mantenido con el Presidente. ¿Cual es su éxito? El tan cacareado triunfo en las municipales. ¿Qué triunfo es el que, a pesar de contar con más votos globales, les hace perder peso político, concejales y alcaldías? No parece pues que tenga autoridad moral suficiente para enseñar la puerta de salida del partido a quien pida que se abra un debate ideológico. Ni parece que sea democrático el que ya sólo dicho planteamiento produzca dicho rebote. Con una mano dice que se presente quien quiera, y con la otra le enseña la puerta de salida si se atreve a hacerlo.

Es la eterna historia de la derecha: la desunión y el personalismo, así como la adhesión inquebrantable. Ahora se entiende la poca intensidad de la oposición de estos cuatro años. Los líderes que dijeron que el PP no había sabido explicar sus postulados, ahí tienen la explicación a ello. No se explicó lo suficiente porque no se cree en ellos lo suficiente.

Y es que la sombra de Gallardón es alargada. Y la de Fraga.

1 comentario:

  1. Je je je... ¿Quien habrá enseñado a Rajoy a actuar así?... ¿Crees que se le ha ocurrido a él solo?...
    "La desunión y el personalismo", dices. Pues sí, solo se diferencia de la izquierda en la desunión, porque el personalismo... bufffff... No hay más que ver a su ídolo, el Zetas.

    Yo siempre he dicho que no hay un solo partido que valga para nada. Todos los políticos son iguales, se aferran al sillón y hay que sacarlos prácticamente a la fuerza.
    Pobres de nosotros.

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