El Tribunal Constitucional ha estimado parcialmente el recurso de amparo presentado por la exministra socialista Magdalena Álvarez, condenada por un delito continuado de prevaricación en el caso de los ERE de Andalucía.
O lo que es lo mismo:
El Tribunal Constitucional libra a Magdalena Álvarez de su condena por el caso de los ERE
Un tribunal político erigiéndose en tribunal de casación del Tribunal Supremo, usado por la corrupción para salvar a sus corruptos. O sea, el colmo de la corrupción política que acaba así con la división de poderes.
Algunos llevamos tiempo diciendo que el Tribunal Constitucional debiera desaparecer tal como está, para pasar a formar parte del Poder Judicial como una Sala del Tribunal Supremo. Así no se usaría como una "instancia superior" (Sánchez dixit) al mismo, sometiendo la justicia a la política.
Esto es el inicio de una operación para salvar a todos los corruptos condenados por el caso ERE de Andalucía y así facilitar hacer lo mismo con los miembros de la familia que puedan ser condenados por corrupción. La justicia soy yo, que dirá Sánchez.
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