¿Se acuerdan de cuando el PP decía que el "referéndum" del 1-O no sólo no tenía valor, por ser ilegal, sino que ni siquiera se habría producido? Luego ya hemos visto lo que ha venido detrás. Pues ahora estamos en un cuento parecido desde el PSOE con lo de esa consulta que aceptan acordar con ERC diciendo que es consultiva y no vinculante.
Vamos a ver, si los independentistas consideran válido un "referéndum" ilegal, ¿alguien se cree que no van a dar por válida esa consulta si sale lo que les interesa? Además, el PSOE se lo pone en bandeja pues si sale independencia, dirán que eso es un mandato, pero si no sale, dirán que no es vinculante y seguirán en su empeño. Por no hablar de que se acepta que sólo los catalanes opinen sobre lo que nos afecta a todos los españoles, lo que implica aceptar la división de la soberanía popular.
Desde el PSOE tratan de quitarle importancia elevando al absurdo los argumentos de quienes alertan del peligro de desmantelamiento de España, diciendo que eso no pasará. Y tienen razón, no pasará inmediatamente, pero están ayudando de forma increíble a que los independentistas avancen en sus intenciones al aceptar de facto las premisas en las que basan sus paranoicas pretensiones. Además, seguro que no pasará, pero lo que sí puede pasar es que se produzca un enfrentamiento cruento para impedir que pase.
Por otro lado, el PSOE no es garante de la unidad de España, pues su idea de una España federal asimétrica - que en realidad es más una confederación que federación- no podría plasmarse sin dividirla previamente pues no se federa lo que está ya unido, sino lo desunido.
Lo que hace Sánchez, apoyado por el PSOE, no sólo es traicionar sus promesas electorales y a sus votantes, es una traición a España y a los españoles. Es aceptar que los ricos, los territorios ricos, no repartan su riqueza solidarizándose con los territorios con menos riqueza. O sea, lo contrario de lo que tanto Sánchez como Iglesias andan diciendo de repartir la riqueza y que los ricos paguen más.
Monumentales mentiras para lograr su gran objetivo: el poder. Lo que vayan a hacer con él está por ver.
Era de esperar. El problema no es de la UE sino nuestro, y se refiere a la incoherencia de legalizar a determinados partidos políticos. Exigir el juramento a la Constitución para adquirir la condición de eurodiputado no sería necesario si esa exigencia se hiciera para poder presentarse candidato. O lo que es lo mismo, cumplir con la Constitución y no permitir a partidos políticos que no la respeten presentarse a elección alguna.
"Artículo 6 de la Constitución:
Los partidos políticos expresan el pluralismo político, concurren a la formación y manifestación de la voluntad popular y son instrumento fundamental para la participación política. Su creación y el ejercicio de su actividad son libres dentro del respeto a la Constitución y a la ley. Su estructura interna y funcionamiento deberán ser democráticos."
Si se obligara a cumplir la Constitución muchos de los partidos políticos actuales no podrían existir sin el respeto a la Constitución y a la ley. Muerto el perro, se acabó la rabia. No es normal que partidos contrarios a la Constitución y que se consideran no afectados por ella, decidan sobre asuntos comunes saltándose la ley.
"La justicia no puede someterse a votación popular, por lo que un procesado no debería poderse presentar a elección alguna para equiparar su elección, de producirse, con su absolución. Las elecciones no pueden convertirse en una forma de eludir la acción de la justicia."
Es lógico que la UE considere que si un partido es legal es que que está dentro de la Constitución y la ley, al igual que sus candidatos, por lo que huelga cualquier requisito si es declarado electo. Lo que no es normal es que ese partido o ese candidato pueda concurrir a unas elecciones sin cumplir lo que la Constitución exige para que dicho partido sea legal
Cuando no se aborda y corrige la causa de un problema es imposible corregir sus consecuencias. No podemos pretender que la UE solucione los problemas internos que no nos atrevemos a corregir nosotros. La justicia no puede someterse a votación popular, por lo que un procesado no debería poderse presentar a elección alguna para equiparar su elección, de producirse, con su absolución. Las elecciones no pueden convertirse en una forma de eludir la acción de la justicia.
En cualquier caso, no creo que el Tribunal Europeo haga algo sin la previa aprobación del gobierno correspondiente, así que esto me huele a producto de la negociación de Sánchez con ERC.
Estamos a punto de que nos cuelen una falacia similar a la de "la derrota de ETA". Quienes mantienen esa falacia siguen diciendo que la banda no logró su propósito porque el País Vasco no es independiente. Vamos a ver, aún no, pero no hay más que ver los avances en ese sentido, pero, sobre todo, ver donde están y lo que mandan los amigos de los terroristas. Ya hasta reunidos en el Congreso con el PSOE, partido del Gobierno, negociando ventajas para sus terroristas presos.
Pues con lo de los independentistas catalanes pasará igual. Se dirá que no es verdad que se les dé lo que quieren, mientras se les va dando lo que necesitan para lograr lo que quieren.
El independentismo necesita más tiempo para, con sus avances, conseguir más adhesiones hasta lograr que la mayoría de los catalanes se conviertan a su religión independentista. Entonces será el momento. A ERC lo único que le interesa ahora es gobernar en Cataluña y liderar el procés, lo demás le importa un bledo. Y a Junts por lo Que Sea lo que le interesa es que no le arrebaten ese liderazgo por la izquierda. España les importa sólo para debilitarla.
Ahora lo que les interesa es tener a Sánchez de Presidente para lograr más instrumentos que faciliten su propósito. Con otro Presidente no lo lograrían. Así que el juego es pedir máximos para lograr lo necesario, y así poder dar la excusa para que el PSOE diga que no han cedido mientras se avanza hacia una España confederal que fulminará la unidad de la soberanía popular española.
Para lograr una confederación primero hay que lograr la división. No se confedera lo que ya está unido.
Querer impedir la contaminación de la naturaleza, la extinción de especies o la desaparición de ecosistemas y desear salvaguardar el medio ambiente, no significa apoyar la pseudo religión del cambio climático que culpabiliza al género humano del cambio en el clima.
El clima cambia desde siempre y no por causa humana. Una cosa es la contaminación y otra el clima. Ensuciar un río puede acabar con la vida que sustenta, incluso alterar un micro clima muy localizado, pero los cambios en el clima tienen causas naturales que escapan al control humano. Como ha sucedido siempre desde que existe el planeta.
Esta pseudo religión de moda, de inspiración izquierdista y que toma a una pobre autista ignorante como suma sacerdotisa, ha cambiado incluso el lenguaje. Hasta ahora el término "negacionista" se aplicaba a quien negaba el Holocausto judío por los nazis. Ahora se intenta aplicar, por los medios que apoyan a este movimiento de intereses económicos del que se alimentan, a todo aquel que no comulga con la sarta de mentiras urdidas por científicos a sueldo de dichos intereses.
Así como el comunista disfrazado intenta descalificar a quien no lo es con el calificativo de fascista, este nuevo movimiento de izquierda intenta descalificar, sin siquiera contemplar datos y pruebas, como negacionista a todo el que no tiene a Greta en la cabecera de la cama.
La estupidez humana no tiene límites, pero no la creo capaz de alterar el clima por mucho que los estúpidos griten.
Que Pedro Sánchez es un tahúr del Misisipi es algo que él solito se ha encargado de descubrir, pero no cuenta con que está pactando con quienes no están en su partida de póker más que para despistar de su jugada de ajedrez.
Se puede encontrar con que, cuando crea tener ganada la partida, sus oponentes tiren el tablero al suelo y le descubran que jugaban a otra cosa. Le pueden dejar a las puertas del altar y sin investidura en el último momento. Es lo que tienen los juegos entre tramposos.
Millones de españoles vemos con enorme preocupación cómo su partido negocia con Podemos una coalición de gobierno que hace indispensable el apoyo de partidos nacionalistas. Contemplamos con estupor cómo se incluye a esas negociaciones a formaciones cuyos líderes acaban de ser condenados por sedición y malversación y que siguen desafiando la legalidad y quebrantando los derechos de millones de catalanes. Hace solo unas semanas usted mismo aseguró que ese Gobierno con populistas apoyado en nacionalistas no dejaría dormir tranquilo al 95% de los españoles.
Por ello y pese a las profundas diferencias que nos separen, le propongo una alternativa. Una solución alternativa para hacer uso de esa mayoría de 221 escaños que sumamos en el Congreso los grupos constitucionalistas y moderados. Una vía que ofrezca a España un horizonte de estabilidad para los próximos años. Entre PSOE, PP, Ciudadanos y navarra Suma disponemos de una mayoría desde la que podemos construir un pacto constitucionalista para impulsar grandes acuerdos del Estado que blinden nuestra democracia frente a quienes pretenden acabar con ella, protege a las familias de políticas populistas ante los nubarrones que se ciernen sobre la economía y el empleo y permiten superar este largo bloqueo institucional. Es imprescindible avanzar como Nación y aprobar reforma urgentes, como la educativa, la del modelo laboral, la de la garantía de las pensiones de nuestros mayores o a de luchar contra la despoblación.
Eso es exactamente lo que acabamos de hacer en Europa, donde nos hemos puesto de acuerdo liberales, conservadores y socio demócratas para alcanzar un pacto moderado que permitirá reforzar el proyecto comunitario frente a los populistas y nacionalistas que quieren destruirlo. Por eso, le pido que rectifique, abandone el acuerdo con Podemos y las negociaciones con los separatistas y mire al centro y al constitucionalismo.
Le escribo esta carta para hacerle una propuesta que estoy convencida que es la mejor alternativa para España: Una vez se constituyan las Cortes, convoque una reunión con los grupos parlamentarios de PSOE, PP y Ciudadanos con el objetivo de alcanzar una solución y alcanzar un pacto estable para la próxima legislatura. Sentémonos el señor Casado, usted y yo e intentemos llegar a un acuerdo.
Podemos hacer historia si conseguimos que, por primera vez desde la Transición, los partidos constitucionalistas dejen a un lado las diferencias y se entiendan para que el futuro de España no dependa de los populistas ni de los partidos que no creen en nuestro proyecto común de progreso y de convivencia. Estoy convencida de que una amplia mayoría de españoles así lo quiere.
Esperando que tenga a bien aceptar mi propuesta, le envío un cordial saludo,
Inés Arrimadas
Carrera de S. Jeronimo s/n, 28071 Madrid
Grupo Parlamentario Ciudadanos
Congreso de los Diputados»
Lo normal en cualquier estado de Derecho democrático es que las sentencias de sus Altos Tribunales no sean unánimes. La unanimidad es más propia de estados totalitarios y de ideología única. Tampoco la unanimidad hace más válida una sentencia.
El que los implicados intenten utilizar los argumentos discrepantes a su favor en otras instancias europeas, no puede ser que obligue a Tribunal alguno a buscar la unanimidad en sus sentencias por encima de que la sentencia sea justa y acorde a las leyes. Por otra parte no existe país alguno en Europa dispuesto a que su Constitución sea juzgada fuera de sus fronteras, como poco menos que sería llevar este caso a Europa.
Como muchos anunciamos, de la sentencia de los ERE se habla con sordina mientras los medios más importantes intentan minimizarla y excusar a los condenados. Pero pocos creímos que el silencio de la derecha fuera tan clamoroso.
Deben haberse creído eso de que no es un caso del PSOE el que dos de los presidentes del PSOE, dos ex presidentes de la Junta, ex Ministros, incluyendo a un ex vicepresidente del Gobierno, cargos de la ejecutiva del partido, diputados, senadores, etc., hayan sido condenados por corruptos. Cuando cometieron los delitos no sólo eran del PSOE, eran de la cúpula del PSOE. El que hoy muchos de ellos ya no sean militantes no puede borrar ese hecho.
O que decir que robar el dinero público casi es aceptable si no va a bolsillos de particulares, no hay que discutirlo. Al margen de que es difícil de creer, resulta que lo que se haga con el dinero procedente de un robo no hace desaparecer el delito de robo, claro que el PSOE se ha beneficiado porque ha conseguido votos comprados con parte de ese dinero. Y los votos son dinero para un partido.
Con ser escandalosa esta corrupción, más escandaloso es el silencio de la oposición. El PSOE no sólo no pide perdón -como sí hizo el PP en su caso- sino que sigue exculpando a Chaves y Griñán. Lo de hayan salido egregios socialistas haciendo creer que ser amigos suyos es un eximente, dice mucho de la doble vara de medir.
Hoy El País hace un editorial en el que apoya todas y cada una de las mentiras y manipulaciones de Ábalos, dejando claro que es un panfleto al servicio de la corrupción si ésta es de izquierda. Se suma a La Sexta, la Ser y a Atresmedia en lo que más parece complicidad y, desde luego, no es periodismo.
Aún quedan unos 150 juicios sobre este caso, con lo que veremos muchos más silencios exculpaciones que harán aún más grave, si cabe, el caso más grave de corrupción de Europa.
El logro del escaño del PP por Vizcaya no es del PP vasco. Quien lo ha logrado en absoluto es de la línea de la cúpula de dicho partido.
Beatriz Fanjul es heredera de la línea de aquel PP vasco que sacaba siete diputados allí, el de María San Gil, no el de Alonso, Semper y compañía. Fue una apuesta personal de Casado, por lo que no se entiende su posterior alineamiento con ese PP vasco contrario a Fanjul, Cayetana y al propio Casado.
Y tanto es así, que Fanjul no se fía de la cúpula de su partido en el PP vasco, hasta el punto de que para revisar el recuento de los votos, gracias al que recuperó ese acta para el PP, pidió que vinieran de Madrid a ayudar a ello pues no se fiaba de sus compañeros de allí.
Casado ya está tardando en descabezar aquello y cambiar su cúpula. Como también en desmarcarse de Ana Pastor y demás blandiblús. Y en hacer algo para evitar un Gobierno de comunistas y separatistas. Que dé un paso y ofrezca un Gobierno de coalición a Sánchez.
Siempre será mejor un Gobierno presidido por un mentiroso sin escrúpulos ni principios, que un Gobierno presidido por ese mentiroso sin escrúpulos ni principios con ministros comunistas y apoyado en independentistas y proetarras.
El PP y Cs deben hacer un ofrecimiento de Gobierno al PSOE. No de abstención para evitar que Sánchez se apoye en los independentistas, sino de Gobierno de coalición para que no gobierne con los comunistas. La excusa de que no lo aceptará no debe ser motivo para no dejarle sin la excusa de que no tiene alternativa y por eso hace ese pacto con extremistas. Es momento de hacer, no de decir. Es momento de sacrificar, no de buscar rentabilidades políticas. Es momento de ayudar a España para que no acabe desmantelada, no de intereses personales ni partidistas.
Pero mientras Vox no acabe con el sambenito de ultraderecha que le han colgado desde la izquierda, extrema izquierda y medios afines, todo lo que apoye directamente será rechazado por el PSOE de Sánchez con la excusa de que viene de la ultraderecha, así que no debe siquiera plantearse un apoyo directo a una propuesta del PP y Cs, suponiendo que se produjera*.
Pero sí debiera asegurar Abascal que no aprovechará el quedarse solo en la oposición por la derecha para atacar y descalificar al PP y a Cs por ese motivo. A ver si así a Casado se le quita el miedo y decide hacer algo por España en vez de mirar sólo los intereses de partido y los suyos propios.
De hacerse ese ofrecimiento desde PP y Cs -que considero imprescindible aunque sólo sea por transmitir que se está dispuesto a hacer algo-, dejando los intereses partidistas atrás, para impedir un gobierno del comunismo apoyado por el separatismo, cuyo objetivo claro es acabar con la Constitución, la monarquía y la economía libre de mercado. Como digo, de hacerse ese ofrecimiento, Abascal debiera hacer encaje de bolillos para no apoyarlo claramente y, al tiempo, no descalificarlo por haberse integrado, ciñéndose a hacerle oposición por sus actos de gobierno, si se llega a constituir como Gobierno, y no por las renuncias que desde PP y Cs se deban hacer para estar en él. Y desde luego, debiera contener a su ala más dura para que no se desmande.
A Abascal le recordaría que los ciudadanos cuando votan ceden su representación para lograr un objetivo, las tácticas y estrategias para ello es cosa de los electos. No estamos en una democracia asamblearia.
De llegar ese gobierno el espejismo de las ayudas, subidas de salarios mínimos, del mínimo de las pensiones y subvenciones de todos tipo, durará lo que dure el dinero. Cuando se vacíe le caja, adiós, pues ni siquiera tendremos quien nos deje dinero -el BCE deja de comprar deuda en cuanto un país se sale de la senda marcada, recordemos el caso de Grecia- para mantener ese gasto. Y la recaudación bajará porque bajará el dinero al que imponer impuestos. Lo que llevará inevitablemente a, no sólo no poder mantener esas ayudas sino a eliminarlas e incluso a reducir las pensiones. Ya pasó en Grecia cuando llegaron al gobierno los amigos de Podemos.
Alegrarse por la bajada de la Bolsa, como han hecho desde Podemos, y de que las empresas ganen menos es un suicidio de ignorantes liderados por quienes quieren cargarse el sistema económico para implantar el suyo. Justo ése que ha empobrecido a los países en los que se implantó, excepto en China, debido a que en este país convive extrañamente con un capitalismo elitista. Claro que no empobrece a sus dirigentes.
Ya no es momento de palabras ni de decir lo que guste oír, es momento de hacer. Es momento de mojarse. Casado debe librarse de sus rémoras y bajar al ruedo. Y eso significa ofrecer un Gobierno de coalición, no sólo una abstención. Cs también. Y Abascal, si no ofrecer su apoyo directamente para no dar excusas para que el ofrecimiento sea rechazado, sí debiera comprometerse para no usar ese hecho para atacar a PP y Cs por mucho que se lo pida el cuerpo y una parte de su electorado. La libertad tiene su precio, no es gratis, y hay que luchar por ella estando dispuesto a pagarlo.
(*) Ya señalé como un tremendo error de PP y Cs no haber contrarrestado en su momento esa falaz campaña contra quienes son sus aliados naturales. Y no lo hicieron por intereses partidistas y electorales. No les ha ayudado mucho no hacerlo, sobre todo a Cs.
El asunto del pacto es tan disparatado, contradictorio con la postura tradicional del PSOE y con la del propio Sánchez -que se puede ver repetida hasta la saciedad en multitud de vídeos en las redes sociales-, tan contrario a los intereses económicos de España y de la propia Europa, es tan disparatado de cara a nuestra posición internacional, que empiezo a pensar si no es un monumental teatro para lograr otra cosa.
El Sanchismo se ha cargado al PSOE. Los socialistas que se llevan las manos a la cabeza con este pacto ya no pintan nada en un partido tomado por el sanchismo y por la conveniencia del marketing político de Iván Redondo. Por no mencionar a unas bases totalmente infiltradas por el comunismo podemita.
Sánchez ha demostrado tan claramente que no se mueve por principios sino por las encuestas y cálculos de marketing político, que no sería de extrañar que con esto no pretenda más que asustar con lo que es capaz de llegar a hacer. Esto es lo que su propio partido temía y por lo que lo descabalgaron de la Secretaría General, que luego recuperó con trapicheos y estrategias sorprendentes por lo inesperadas. Su osadía es infinita y lo que está dispuesto a cargarse para lograr sus intereses, impredecible.
A Casado lo ha pillado con el paso cambiado y ha hecho que se quede en evidencia al forzarle a dejar claro que le importa más su partido que España, con lo que su discurso ha quedado como una pose falsa. El miedo que ha metido podría hacer que con tal de salvar la situación e impedir un triunfo de la extrema izquierda, socia del independentismo, los partidos constitucionalistas traguenn con cualquier cosa que no fuera el engendro que anticipa el pacto.
"Fijáos en la que puedo liar si no me dejáis seguir como Presidente", podría decir Sánchez. Está claro que las exigencias que desde la derecha se le hubieran podido poner encima de la mesa, como condiciones para dejarle ser el Presidente del Gobierno, se rebajarían considerablemente ante la certeza de lo que sería capaz si se le ponen impedimentos. Los partidos que se sumasen a ello tendrían fácil justificarlo ante su electorado. Sánchez no tiene más objetivo que el poder, que ser el Presidente. Sabe que desde esa posición puede comprar voluntades y hacer olvidar sus contradicciones y traiciones. No tiene ni reparos ni remilgos ni líneas rojas. Ni tampoco escrúpulos. Y se atreve a todo. Es un psicópata con necesidad del poder. Y eso ya se sabe lo desastroso que ha sido en la Historia, así que mejor contentarle que contrariarle.
Por ello ya dije que estoy seguro de que pactaría con quien fuese si ello le supone ser Presidente con los menores sobresaltos posibles. Y de seguro que tendría menos con la derecha que con toda esa panda con la que pretende aliarse de nuevo y ante quienes swe tiene que justificar intentando contar con ellos. La misma que le llevó a ser Presidente pero que ahora va a pedir más cada vez. Mucho más de lo que le pedirá la derecha, dispuesta a más sacrificios por España que quienes quieren cargársela. O eso debiera.
Lo que seguro que Sánchez no hará es convocar de nuevo elecciones, pues sabe que esta vez eso sería su hecatombe definitiva. Ya a dejado su patita al descubierto. Así que no contará con la gente sino con los políticos que no están dispuestos a perderlo todo. Ya se quitó de encima a Rivera. Ahora tiene pillado a Casado que sabe que no ha convencido tanto como esperaba, por lo que a pesar de haber salvado los muebles aún no tiene los cimientos de la casa donde ponerlos.
Desde luego que con este susto Sánchez ha facilitado a Casado y a Cs justificar su apoyo a un Gobierno de Sánchez para evitar que se apoye en lo que sería malo para los intereses de España, pero en lo que estaría dispuesto a apoyarse para sus intereses personales. Puede que si se espera más no haya más remedio que apoyar a un gobierno en donde también esté Podemos, para así evitar que esté apoyado por los independentistas y Bildu. No es tiempo de esperas, ya se va con retraso.
Ni Casado ni el PP pueden estar satisfechos ni hablar de "remontada". Han superado su último descalabro, pero no el anterior. Ni mucho menos se acerca a superar la pérdida de tres millones y medio de votos respecto a cuando dilapidó su mayoría absoluta.
La apuesta de Casado por apoyar al PP vasco y contar con Ana Pastor no ha logrado, ni de lejos, llegar al número de diputados que tuvieron cuando perdieron la moción de censura.
Apoyar a Alfonso Alonso cuando descalificaba a Cayetana se ha evidenciado como un error de primera cuando aquel no ha logrado representación alguna para el PP en el País Vasco, mientras Cayetana ha doblado la representación en Cataluña.
El centrismo y la inmersión lingüística de Feijóo mejora respecto al desastre de abril pero se queda a la par con el PSOE, lo que tampoco es para echar cohetes pues no pinta bien de cara a las elecciones gallegas de dentro de un año.
O Casado vuelve a ser Casado sin la barba de Rajoy, o no sale del hoyo aunque el PSOE caiga. O toma la iniciativa o el próximo partido hegemónico de la derecha será Vox.
El centro no existe, es sólo un espejismo coyuntural, un posicionamiento en un momento determinado, no una ideología. O el PP se define claramente o le sucederá lo que a Cs, UCD, CDS y UPyD.
Ahora tiene que fijar su estrategia para que Sánchez no lleve a España a un gobierno con los enemigos de España y de la economía de mercado. Y ello pasa por tomar la iniciativa. Que el problema de España es Sánchez está claro, pero no se va a ir y su partido no está en disposición de sustituírlo. Así que toca jugar con él pero amarrándolo en corto. De lo contrario nos arrastrará al desastre e incluso al enfrentamiento interno.
Y que recuerde que antes el problema eran Rajoy y Sánchez, así que mejor no volver a hacer que el problema sean esas dos personas cuando ya nos habíamos librado de una. Que hable con Abascal -con Cs no sé quien debiera ser el interlocutor- y llegue a algún tipo de acuerdo que permita hacer un ofrecimiento a Sánchez que lo desenmascare de una vez. Y que aproveche su psicosis con el Falcon para ofrecerle seguir en él pero tutelado y con condiciones.
Casado anda muy despacio ante la que se nos viene encima. Ya tendría que haberse reunido con Abascal para lograr un compromiso de que no va a aprovechar el quedarse sólo en la oposición, por la derecha, para desangrar al PP si éste ofrece a Sánchez, junto a Cs, un gobierno de concentración constitucionalista para impedir que se apoye en la extrema izquierda y en los independentistas.
Debiera diseñar una campaña de comunicación que explicara sin lugar a dudas la emergencia nacional que obliga a ello, y lograr la colaboración de Vox en dicha campaña. Y paralelamente dar el paso de presentar un pacto constitucionalista a Sánchez con una serie de condiciones de máximos para luego ir negociando y no dar la impresiín de intransigencia, sino de estar dispuestos a sacrificios por España. Abascal no se sumaría a esa proposición, claro; pero no para torpedearla sino para hacerla posible. Se trataría pues de una operación de Estado para salvar el Estado.
Si Sánchez llega a un acuerdo de Gobierno con Iglesias tendría en el Gobierno a ése al que acusó de apoyar a los independentistas, diciendo además que ese hecho no le permitiría dormir. No me cabe duda de que ese acuerdo existe soterrado y que se fraguó bajo el auspicio de Roures y Soros. Como tampoco tengo dudas de que Rivera estaba convencido de ello y por eso su no rotundo a Sánchez enfrentándose a la mitad de su propio partido. Pero falló en la comunicación, se perdió en ataques a sus socios naturales y ahí está ahora Rivera y los restos de su partido.
Estoy seguro de que la ausencia del Rey, de viaje por Cuba, es algo calculado y que obedece a algún plan que no será bueno ni para la monarquía ni para el constitucionalismo, o sea, malo para España. Sea lo que sea que planee Sánchez, o se toma urgentemente la iniciativa o perdamos toda esperanza. Si vuelve el Frente Popular será para quedarse.
Si de verdad se quiere impedir lo que parece venir, no hay que perder ni un minuto más para tomar la iniciativa. Aunque no salga el plan.
El Mundo se suma a la campaña de desinformación para intentar aislar a Vox en la que están El País, La Sexta, La Vanguardia, y demás medios que temen por sus subvenciones y privilegios. No es verdad que Rivera se desmarque de la PNL de la CAM, pues esa PNL no dice lo que se quiere hacer creer. Lo que sí es cierto es que la política de comunicación de los partidos que no forman parte del bloque de la izquierda sanchista, deja mucho que desear.
La PNL "insta" al Gobierno de la Comunidad de Madrid a "instar al Gobierno de la Nación a la ilegalización inmediata de aquellos partidos separatistas que atenten contra la unidad de la Nación con los instrumentos legales a su alcance o procediendo a las reformas legales que habiliten a ello."
Por ello no se quiere ilegalizar a los partidos independentistas sin más, sino a los que "atenten contra la unidad de la nación". Por lo tanto, no se quiere ilegalizar ideas sino actos.
He aquí la PNL:
3.1 Expte: PNL 66(XI)/19 RGEP 8243 Autor/Grupo: Grupo Parlamentario Vox en Madrid. Objeto: La Asamblea de Madrid insta al Gobierno de la Comunidad de Madrid a: 1.- Instar al Gobierno de la Nación a la ilegalización inmediata de aquellos partidos separatistas que atenten contra la unidad de la Nación con los instrumentos legales a su alcance o procediendo a las reformas legales que habiliten a ello. 2.- Instar a la Unión Europea que inscriba a los denominados como CDR (Comité para la Defensa de la República), en la lista de organizaciones criminales y terroristas, remitiendo a tal fin expediente con los datos relativos a la investigación judicial seguida por la Audiencia Nacional. 3.- Se proceda de inmediato a suspender cualquier pago y en su caso a revocar y ordenar el reintegro de todo tipo de subvenciones o ayudas públicas que pudieran estar percibiendo de cualquier organismo público autonómico, los denominados CDR o cualquier otra asociación u organización que tenga relación directa o indirecta con la misma. Publicación BOAM núm. 21, 24-10-19.
Así, por encima, lo que más destacaría del debate de mujeres de anoche -que ya tiene gracia que se haga en nombre de la igualdad cuando es evidente que se hace precisamente porque no la hay- es que el PP evidenció que sigue siendo el de Rajoy. Ana Pastor estuvo en plan Seño intentando dar clase a díscolas alumnas e intentando investirse de una autoridad que ya no tiene, además de usar el argumento clásico de Rajoy de usar los años de experiencia viviendo de la política como mérito, dando la impresión de que se presentan para dirigir la Administración más que para gobernar para todos. Debió ser por eso que cuando gobernaron no corrigieron las leyes políticas que prometieron corregir, sino sólo las administraron.
Las otras participantes debieron respirar aliviadas cuando supieron que el PP no enviaría a Cayetana, que no sólo estuvo presente por su ausencia sino porque la otra Ana Pastor -la jefa del debate y debatiente también, pues interrumpió todo lo que quiso que no se oyera- la mencionó directamente para que la representante del PP la desautorizara, con lo que quedó claro que Cayetana está en el PP para que el partido la use como freno a la fuga de votos hacia Vox y reclame una posición en Cataluña, mientras le hacen creer que ha vuelto a un partido que ya no es del que se fue por no estar de acuerdo con la deriva de Rajoy. La misma que vimos ayer que sigue imperando en el PP cuando habla de política a nivel nacional. Supongo que Álvarez de Toledo se dará cuenta de ello y verá que su discurso encaja más en el partido al que intenta que no se escapen los votos y terminará yéndose detrás de ellos.
La señora de Iglesias, Irene Montero, estuvo de eco de su marido con la novedad de que usó el que tiene hijos como refuerzo de su recién adquirida autoridad por ser madre. Por lo demás, estuvo efectiva en el uso del populismo y en hacer creer a su parroquia que el hablar sin respirar es tener más razón, así como en ocultar su comunismo bajo un populismo en el que no hace más que escudarse, y en usar la palabra democracia para tapar que lo que entienden como tal poco tiene de democracia.
Inés Arrimadas demostró que tiene más nivel que su jefe y comunica mejor, además de que no se amilana ante técnicas de despiste en los debates que no le hacen perder el hilo, como sí le ocurre a la representante del PP. Frenó eficazmente las constantes interrupciones que sufrió, incluso por parte de la pastora del debate.
La Ministra Mª Jesús Montero estuvo efectiva para los suyos, que era de lo que se trataba, y evidenció que su fuerza está en su capacidad de usar el populismo y la mentira de forma contundente para hacer creer que tiene razón. Es una artista en presentar la hipocresía como firmeza para evitar entrar en el fondo del asunto y así ocultar que no tiene más plan que ganar al oponente, pero nada que ofrecer como solución a lo que debiera ser acción de gobierno. Y experta en la técnica de la interrupción para que los demás no puedan hilar sus argumentos. Ruidosa y efectiva creando humo e intentando desprestigiar a las personas para no tener que rebatir sus ideas.
Rocío Monasterio firme en sus convicciones y muy concisa defendiendo principios claros que no necesitan de mucha explicación por ser de sentido común. Efectiva y con un "minuto de oro" que compitió en brillantez con el de Inés Arrimadas. Muy lejos quedaron los de las otras dos, una por populista y huera, la otra por aburrida y falta de fuerza.
Esto ya es paranoia gerracivilista. Más parece querer ganar una guerra que su partido perdió hace ochenta años. Su partido, no todos los españoles, y es un tremendo error volver a polarizar a la sociedad con heridas que ya no son suyas sino de nuestros antepasados, porque nos puede condenar a abrir nuevas y acabar como entonces. Una completa irresponsabilidad en busca de votos de ignorantes, sectarios y paranoicos. Franco murió hace más de cuarenta años, no lo acaba de matar él como parece creer, sólo desenterró sus huesos para volver a enterrarlos. Que vuelque su valentía en enfrentarse a los dictadores vivos con los que parece llevarse tan bien.
Rufián, desde su histérica ignorancia, llama a Vox fascista, xenófobo y racista. Un poco de Historia no vendría mal para recordarle de donde vienen sus sobrevenidos héroes catalanes, que sus raíces ya sabemos que vienen de otras tierras del sur de España.
Miquel Badía, el torturador que llevó el terror fascista a Cataluña y que admira Torra
Conocido como el «Capità Collons», se hizo famoso por reprimir a sindicalistas y huelguistas de la mano de los «escamots», una organización paramilitar catalana
Manuel P. Villatoro
«En la calle de Muntaner, esquina a la de la Diputación, se registró un atentado contra el exjefe superior de la Policía, señor Badía, y su hermano don José. […] Se cree que los autores del atentado son elementos pertenecientes a la FAI». Con estas palabras desvelaba el diario ABC, en su edición del 29 de abril de 1936, el ataque que habían sufrido dos de los personajes más controvertidos de la época: Miquel y Josep Badía. Unos héroes para Quim Torra que se hicieron famosos (el primero especialmente) por usar a los «escamots» del partido nacionalista Estat Català para reprimir brutalmente a los sindicalistas y huelguistas detenidos en Cataluña.
El atentado, perpetrado una jornada antes, fue narrado pormenorizadamente en varios artículos de este diario. De hecho, todo ocurrió sumamente rápido y mediante un ataque sencillo, pero quirúrgico. «Frente a la peluquería establecida en el chaflán de la calle Muntaner […] se estacionó un automóvil. Del coche descendieron dos de sus ocupantes que, cruzando la calle, entraron en el portal de una casa», narraba el ABC. El resto es historia. Los sujetos esperaron a que los Badía pasaran por aquel lugar y les descerrajaron tres disparos a cada uno para, posteriormente, marcharse en su Ford de color rojo.
Ambos murieron. Miquel, apodado por su barbarie como «Capità Collons», inmediatamente. Tras él, eso sí, el «Capitán Cojones» dejó una triste estela de muerte y represión en nombre del independentismo más extremista. Así lo afirma el historiador Agustín Guillamón en « Justo Bueno (1907-1944)», un dossier en el que desvela que el pequeño de los Badía «había destacado por usar habitualmente la fuerza pública contra los huelguistas y por torturar sistemáticamente a los sindicalistas detenidos, incluso con simulacros de fusilamiento».
Su descripción se queda corta, pues fundó, además, los ya mencionados «escamots», una milicia paramilitar con la que llevó el fascismo a Cataluña. Miquel, seguidor de Benito Mussolini y adalid de la violencia contra todo aquel que difiriera de sus ideas, es el sujeto al que el mismo Quim Torra, presidente de la Generalitat, ha tildado de «uno de los mejores ejemplos del independentismo».
Fascismo en Cataluña
De los dos hermanos, bien merece la pena centrarse en la figura del «Capità Collons». Según explica el historiador Antonio Gascón Ricao en su artículo para la Real Academia de la Historia sobre este personaje, Miquel Badía i Capell nació en Lérida el 10 de marzo de 1906. Curiosamente, el futuro torturador de sindicalistas intentó, en sus primeros años, estudiar para ser piloto de la marina mercante. Sin embargo, la política no tardó en llamar a su puerta y cautivarle. Así fue como se afilió al partido nacionalista recién creado por Francés Macià: Estat Català.
A partir de ese momento inició una vida de violencia y extremismo que comenzó con un intento de asesinato. Aunque, en este caso, fue detenido y encarcelado por las autoridades. «En junio de 1925, implicado en un intento de atentado a Alfonso XIII, durante la visita del Rey a Barcelona, y que debería haber tenido lugar en Garraf, fue detenido y condenado a doce años de prisión, que cumplió en parte en las prisiones de Alcalá y Ocaña, al ser amnistiado tras la caída del dictador Primo de Rivera en 1930», explica Gascón.
Su vida, a partir de entonces, estuvo ligada al independentismo más extremista desde las mismas Juventudes de Estat Català. Su ascenso fue fulgurante. No en vano, allá por 1932 (cuando no sumaba ni 30 primaveras a sus espaldas) fue nombrado secretario del mismísimo Josep Dencàs. En diciembre del año siguiente logró ascender hasta la secretaría general de Orden Público y, en 1934, consiguió ser nombrado jefe superior de los servicios técnicos de la Comisaría General de Orden Público de la Generalitat.
Su barbarie, sin embargo, empezó en 1932. Y es que, ese fue el momento en que empezó a organizar los «escamots» bajo el mando de Dencás. Una organización que cobró importancia pocos años después. «El binomio Dencás-Badía, desde principios de 1934, había instaurado en el departamento de Gobernación de la Generalidad un aparato de represión y persecución obrera y anticenetista, que usaba métodos fascistas y racistas», señala, en este caso, Guillamón.
Vistos con el paso de las décadas, las similitudes entre los «escamots» y algunas de las organizaciones presentes en la Alemania de los años 40 son innegables. Al fin y al cabo eran definidos como un «ejército propio» a las órdenes del partido, vestían camisas verdes como uniformes y solían desfilar como militares por la ciudad.
Al frente de los «escamots» comenzó su reinado del terror. Aupado por el partido, el «Capitá Collons» inició una represión brutal contra los sindicalistas y los huelguistas. El máximo exponente de su barbarie se vivió a partir de diciembre de 1933, durante una famosa huelga de transportes acaecida en Barcelona. Aquellos días, los «soldados» de Badía la emprendieron, en muchos casos, a tiros contra los piquetes de la FAI-CNT.
Cielo e infierno
Posteriormente, proclamó el Estado Catalán el 6 de octubre de 1934 junto a Luis Companys. Un hecho que quedó recogido en un artículo del diario ABC de la época: «Serían ya las siete y cuarto. […] Badía y otros jefes del [partido] Estat Catalá comenzaron a vitorearlo y aplaudir frenéticamente, dando vivas a Cataluña libre y otros que eran contestados a coro por los entusiastas».
Tras ser cercado en la Conselleria d’Interior por las tropas leales a la Segunda República, se vio obligado a huir por las alcantarillas. Tuvo suerte a medias, pues a pesar de ser el jefe de la Policía logró escapar junto al propio Dencás y -en palabras de ABC- a Pérez Ferrero, Pérez Salas y el ex director de Seguridad Menéndez. «Huido a Francia tras la derrota del levantamiento, pasó por América, Alemania, Bélgica y, finalmente, se afincó en Andorra», añade, en este caso, el autor de la Real Academia de la Historia.
Cuando el Frente Popular obtuvo la victoria en febrero de 1936, Miguel Badia volvió a Barcelona. Su objetivo no era otro poner de nuevo en marcha los «Escamots». No obstante, fue asesinado junto a su hermano en el atentado de abril.
"Si algún español se ahoga y pide socorro, contéstale: ''Niz eztakit erderaz'' (no sé castellano)".
Eso lo dijo Sabino Arana. Por cierto, vuestra sede se sigue llamando Sabin Etxea, ¿no?
Llamar racista y xenófobo al PNV es definición, no insulto. Y no sóis todos los vascos.
El PNV, ése que sí da la mano a etarras. El que estuvo dividido entre apoyar o no el alzamiento militar. El mismo cuyas organizaciones en Álava y Navarra se adhirieron a los sublevados. El que traicionó a la República negociando la rendición del País Vasco ante los nacionales. El que entregó intactas las industrias de Bilbao que luego fabricaron más armas para los franquistas que para los republicanos.
Y ahora de ofendidos antifranquistas. Cuarenta y tantos años después de muerto Franco. Y decidiendo quienes son franquistas o no. Así, porque lo dicen ellos.
Sánchez no tiene el nivel de aquellos artífices de la transición a los que se refiere Luis Herrero en su documentado artículo. Y ha confundido el silencio de quienes aceptaron esa reconciliación con un asentimiento a su descerebrado intento de revancha y de cargarse aquel perdón mutuo de la transición. Y ha confundido otra cosa: Franco venció al PSOE, no a España. Y que quienes ayudaron a esa victoria, y sus herederos ideológicos, aceptaron la reconciliación, no la derrota. Y olvidó otra cosa importantísima, que la mayoría de los españoles hace mucho que están a otra cosa, muchos de ellos porque ni la vivieron y otros muchos porque no quieren remover errores que hagan repetir tragedias compartidas. Él ha removido fantasmas y desenterrado rencores en quienes no tienen memoria de nada de eso ni conocen la Historia más que a través de consignas de partido. Y ha despertado al monstruo de la división y el enfrentamiento. No contaba con que quienes guardaban silencio sin ser partidarios de unos bandos que ya olvidaron, hablarían de lo que saben y señalarían la traicionera tropelía de quienes han roto todo eso creyendo lograr unos votos. Ojalá y se les vuelva al revés, pues un gobernante que, diciendo que busca concordia, lo que despierta son viejos rencores y enfrentamientos en la sociedad, se declara a sí mismo como un peligro para esa sociedad y su paz social. Algo imprescindible para que esa sociedad progrese en paz.
La manifestación de hoy, como tal, es un éxito indudable. Sí, pero no parece haber superado el poder de convocatoria del independentismo, y es así como se va a medir su éxito o no. En cualquier caso me temo que lo que avisé como riesgo se cumple. La afluencia será menor que la manifestación independentista de hace una semana, no hablo de la de ayer, con lo que la batalla de la propaganda la tendrá ganada el independentismo. El mismo que paga sus campañas de imagen con el dinero de todos.
Me reafirmo en la torpeza de SCC con esta convocatoria, que lo que más ha evidenciado es la falta de unidad del llamado bloque constitucionalista, y al que han pretendido añadir a quienes no están claramente con la Constitución.
Un derroche de oportunidad y del capital que supone el hartazgo de la gente con el procés, por la falta de credibilidad, de previsión y de coordinación de SCC, que ya no concita la adhesión unitaria ni la confianza de antaño. Cosas de dejar que se vea el plumero, claro. Un error de cálculo y de objetivo. SCC no es lo que fue ni volverá a serlo, aunque seguro que sí aumentará sus subvenciones.
Tampoco ha ayudado el que no se haya garantizado el derecho a la libre movilidad de las personas al no impedir decididamente esos bloqueos a carreteras y ferrocarriles. Me temo que en algunos casos incluso protegidos por quienes deberían haberlos impedido.
Me apena ver una oportunidad perdida. Hay momentos en los que uno hubiera preferido no tener razón. Para la propaganda independentista ya no valdrá que la manifestación sea un éxito, sino que han sido menos que ellos. En cualquier caso, aunque la asistencia haya sido similar, un reflejo de la falta de clara unidad del constitucionalismo, y un dramático espejo de la radical fractura de la sociedad catalana. De ahí al enfrentamiento, tan sólo un paso.
La sentencia ha desatado la estupidez generalizada, que más parece constitucionalizada. Entre decir que lo que pasó hace dos años en Cataluña fue sólo un sueño, una chorrada que sólo alteró el orden público, entre eso y la convocatoria de varias manifestaciones para protestar por la violencia, y no por la alteración del orden constitucional que la desata, que lo que sí hacen bien es evidenciar la total falta de unidad entre los que se dicen constitucionalistas pero aceptan que en Cataluña no se ataca a la Constitución. Estre aquello, esto y lo de más allá, la estupidez reluce triunfante.
No fue estupidez lo que hizo que el Rey tuviera que intervenir y que eso lograra la reacción de muchísimos españoles que salieron a la calle para exigir que se respetara y acatara la Constitución. No fue un sueño. Ni fue un problema de orden público, que también, fue un ataque a las reglas de juego. Fue un intento Institucional de eliminar la vigencia de la Constitución, la monarquía y la unidad de España. Y ese ataque derivó en una alteración de orden público.
El Supremo se ha lucido anteponiendo la unanimidad en la sentencia a que la sentencia sea justa. Y eso ha sido posible gracias a la estupidez generalizada que será capaz de ascender a Presidente del Tribunal Supremo a quien ha desprestigiado definitivamente al Tribunal Supremo. Recuerda lo de Gómez Bermúdez y su sentencia sobre el 11M que le supuso ser ascendido a la Presidencia de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, cargo en el que fue luego sustituído por Marlaska y que da la medida de en qué manos está la justicia. Gómez Bermúdez acabó saliendo en los papeles de Wikileaks. Marchena se autodescartó en su momento para Presidir el CSPJ aludiendo a su independencia. Ahora se apunta a recibir el premio por los servicios prestados.., a la política.
Tanta es la estupidez que ahora hay quienes se creen que los mismos que han alentado que salga la gente a la calle a protestar contra la liviana sentencia, tachándola de cruel, pues como digo ahora se creen que esos luchan contra la violencia. Esos que han hecho un llamamiento a las brigadas internacionales que han surtido de expertos en algaradas y en quemar la calle a esos cafres, a sueldo pagado con nuestros impuestos, ahora resulta que son los que están contra la violencia. Y para ello han alentado a los provocadores al tiempo que han lanzado a la policía contra ellos, claro. Esa evidencia sólo puede taparse por la estupidez generalizada que se traga cualquier sapo porque le dicen que es una hamburguesa. Y si hay sangre, dirán que es ketchup.
Todos los argumentos de la sentencia están dirigidos a confirmar que hubo rebelión, a que se atentó contra el orden constitucional, y a justificar que los culpables sean condenados con penas que sirvan de escarmiento y suficientemente disuasorias.
Pero luego concluye que no hubo rebelión sino sedición, se les aplican penas livianas de las posibles y se impide la petición de la fiscalía de aplicar el artículo 36.3 del Código Penal, para evitar que los condenados a más de 5 años de cárcel puedan optar rápidamente al régimen de semilibertad penitenciario en Cataluña.
Una descalificación hacia la Fiscalía, hacia el Rey, hacia todos los que, tras el discurso Real, salieron a la calle en Cataluña contra los independentistas, pero que en definitiva lo que descalifica es a esa sala del Supremo y hasta a la justicia española, filtraciones incluidas. Los jueces deben actuar como jueces, no como políticos ni como supuestos "hombres de Estado". No pueden considerarse así quienes generan desconfianza hacia uno de los poderes del Estado.
Ahora toca "acatar" la sentencia y simular que se ha hecho justicia para no dañar más a ese Estado al que combaten los condenados y que seguirán atacando viendo lo barato que les sale. Una sentencia debe buscar justicia, no hacerse perdonar ante la opinión pública internacional por hacer justicia.